SOLID: UN INSTRUMENTO PARA DETECTAR VIDA EN EXPLORACIÓN PLANETARIA

Un equipo de científicos del Centro de Astrobiología está estudiando microorganismos extremos en el Ártico como paso previo para la validación de SOLID para la detección de vida en exploración planetaria. Hace unas décadas que se abandonó la idea antropocéntrica de que la vida sólo era posible en las condiciones restrictivas de nuestro hábitat: temperaturas suaves, oxígeno, radiación solar, agua líquida. Hoy sabemos que la vida se puede dar en unas condiciones mucho más amplias y para demostrarlo están los extremófilos, microorganismos que son capaces de adaptarse a casi cualquier ambiente por muy agresivo que nos pueda parecer. Hay extremófilos para todos los gustos: los que viven sin agua (xerófilos), los que se desarrollan en ambientes con presiones muy elevadas (piezófilos), los que soportan ambientes muy fríos (psicrófilos) o muy calientes (termófilos), los que soportan una alta tasa de radiación (radiófilos), o los que se adaptan a los ambientes salinos (halófilos), alcalino...