Las facultades mediúmnicas de Rosemary Brown le permitieron transcribir obras musicales que supuestamente le dictaban los grandes genios desde el más allá. Su caso no es el único de estas características, pero sí el más espectacular. Rosemary Brown nació el 27 de julio de 1916 en el suburbio Stockwell de Londres. Murió el 16 de noviembre de 2001 en la edad de 85 años. A mediados de los años sesenta, Rosemary Brown, una cocinera londinense viuda y con dos hijos, que tocaba ocasionalmente, como organista en una iglesia, afirmó ser una persona que escribía al dictado, composiciones de músicos desencarnados como Liszt, Chopin, Beethoven, Schumann o Schubert, entre otros. Decía sentir que “sus manos” eran “tomadas” por una fuerza superior que la capacitaba para tocar y transcribir lo esencial de sus sinfonías inacabadas. Rosemary sólo había estudiado piano durante tres años y era incapaz de tocar de oído y de improvisar. Al parecer, sus dotes de clarividencia y clariaudiencia...